Hay lugares en el mundo que no se pueden describir, que debes experimentar. Grecia es uno de ellos. Su historia, su arquitectura, su filosofía y su comida te transportarán en el tiempo hasta la antigüedad, justo cuando nació la democracia.
Conviértete en un dios griego
En cada esquina de Atenas están vivos los mitos de la Grecia clásica. Las ruinas arquitectónicas te envuelven con el manto del tiempo y la grandeza del Acrópolis te hace sentir como un dios en el famoso Olimpo. Sus rincones están llenos de historia, el Partenón, el Templo de Atenea Niké y el Erecteión te esperan para mostrarte como empezó todo, como Sócrates, Platón y Aristóteles, entre muchos otros, crearon la cuna de la civilización occidental.

Tranquilidad Vs. Fiesta
Más de 1.000 islas que colonizan el Mar Egeo albergan toda la paz y toda la fiesta que puedas imaginar. Piérdete en las discotecas, los pubs y los clubes o baila toda la noche en Playa Paradiso. Mikonos no descansa y su actividad nocturna te quitará las ganas de dormir. También puedes dejarte llevar por la serenidad y relajarte a la orilla del mar de Santorini o de Rodas. La armonía entre el azul intenso y el blanco impoluto hace que te olvides de cualquier preocupación.

Como en casa y como en Grecia
Pasear por el barrio de La Plaka es como estar en casa. Sus calles, sus tiendas y sus restaurantes crean una atmósfera que mezcla la sorpresa de lo nuevo con la cercanía de sus gentes. Olvídate de ser un extranjero, los griegos te acogen y comparten su cultura y costumbres con todo el que les visita.

Los mil y un sabores
La gastronomía griega es la dieta mediterránea en estado puro. Diversos platos y experiencias esperan a los amantes del buen comer. Tanto para los menos atrevidos que no dejan atrás el queso feta ni el yogur griego tradicional, como para los que su paladar les empuja a probar la extensa gama de sabores que van desde el Tzatziki hasta la Mousakás.

Verde esperanza y azul inteso
Hay experiencias y actividades para todos los gustos. Los intrépidos aventureros y amantes de la naturaleza encontrarán en Grecia un extenso espacio de aire puro, bosque y montaña. Pero si tu color favorito es el azul, kilómetros de playas te esperan para que te reboces de arena y se te arrugue la piel de los dedos en el mar. Además, olvídate de las condiciones climáticas extremas, deja tanto el abanico como los guantes en casa.

Con estas cinco razones no hay excusa para no querer sumergirte en el maravilloso mundo de la Grecia antigua, experimentar innumerables sensaciones y disfrutar en el Olimpo de la comida y del placer mediterráneo.