Sí, sabemos que Nueva Zelanda no es ese destino al que uno decide viajar sin pensarlo, pero si hay algo de lo que presumen nuestras antípodas es de tener auténticos escenarios de película. Porque por muy lejos que pueda parecer, un viaje de cine a Nueva Zelanda puede convertirse en la excusa perfecta para cruzar el mundo o, al menos, para soñar en convertirse en los protagonistas de la gran pantalla. ¿Te vienes a recorrer los grandes escenarios neozelandeses?
- Hobbiton, Matamata (El señor de los anillos y El Hobbit)
Uno de los más famosos sets de grabación de Nueva Zelanda es, sin duda, Hobbiton, hogar de los Hobbits en El Señor de los Anillos y el Hobbit, un lugar que te hará vivir como uno de estos pequeños seres donde sentirás el comienzo de lo que seguro será una gran aventura. ¿Quién sabe si durante tu estancia te cruzarás con Frodo, Bilbo o incluso Gandalf? Y, para vivir una auténtica fiesta en La Comarca, a finales de septiembre es el día mundial del Hobbit. ¿Te lo vas a perder?
- Monte Taranaki y Valle Uruti (Monte Fuji, El último samurái)
Tan espectacular es el paisaje neozelandés que incluso han utilizado el monte Taranaki y el valle Uruti para transportarnos al antiguo Japón en El último samurái en vez de utilizar el propio monte Fuji. Una vez allí podrás sentir el espíritu de los samuráis por muy lejos que estén y hasta desearás que aparezcan por algún lado, ¡aunque sea para secuestrarte!
- Bahía Shelly y bahía Lyall (Skull Island, King Kong)
Rodeadas por un paisaje de ensueño, estas dos bahías conformaban Skull Island, un lugar misterioso y algo escalofriante donde, además de muchos bichos y animales, se encontraba el gran atractivo de la isla: King Kong. ¿Sabías que también es aquí donde se levantó el enorme muro que le separaba del resto de la isla?
- Flock Hill (La Gran Batalla, Las Crónicas de Narnia: el león, la bruja y el armario)
En la región de Canterbury encontramos estas colinas que, al tenerlas de frente, se hace inevitable no pensar que una guerra -eso sí, de ficción- se está acercando. Sube a lo más alto de las rocas y siéntete un arquero preparado para disparar o baja corriendo por el estrecho paso entre las rocas para enfrentarte cara a cara al ejército. ¿Preparado para protagonizar la batalla final entre las fuerzas de Aslan y el ejército de la Bruja Blanca?
- Parque Nacional de Tongariro (Mordor, El señor de los anillos)
Con unos espectaculares paisajes volcánicos, Tongariro era el escenario perfecto para recrear el reino de Sauron, lugar donde se forja el anillo único y el lugar más escalofriante de la Tierra Media.
Es normal que este parque sea uno de los lugares más visitados de Nueva Zelanda, ya que una vez plantas los pies en sus tierras, se te vendrán a la cabeza las imágenes de la trilogía y estarás mirando de un lado a otro a ver si aparece un orco. ¿Te atreves?
- Campos de Glenorchy (Isengard, El señor de los anillos)
En este enorme terreno tanto de explanada verde como de frondoso bosque se levantó la fortaleza de Sauron, un lugar terrorífico donde más de una batalla se ha librado. Aunque no todo es trágico, ya que es aquí también donde se rodó la mítica galopada de Gandalf y la entrada del anillo a Lothlórien. ¡Un lugar realmente mágico!
- Playa Oreti (El amo del viento)
Además de ser una playa preciosa con unos atardeceres que quitan el hipo, fue el escenario perfecto para el rodaje de El amo del viento y las carreras que disputó Munro en la playa. De hecho, es en esta localización donde Burt logra los récords de velocidad en su motocicleta Indian Scout. ¿Una de cine al atardecer?
- Paradise (X-Men Origins: Wolverine y El Hobbit: La desolación de Smaug)
Pasado Glenorchy encontramos un lugar que ha servido para rodar distintas escenas de películas. En primer lugar, sirvió como la casa en la que se esconde Lobezno tras escapar de Stryker y donde comienza su historia y se forma el personaje. Por otro lado, es la casa de Beorn en el Hobbit donde se esconden los “medianos” junto con Gandalf. ¿Con cuál te quedas?
- Río Pelorus, Marlborough (El Hobbit: la desolación de Smaug)
En este precioso río que transcurre entre montañas y bosques, se visualiza perfectamente cómo los hobbits, metidos en barriles, van bajando con la corriente cuando están escapando de los elfos hasta que… ¡aparecen los orcos! Si sustituyes los barriles por kayaks… ¡podrás ser tú el que recorra ese mismo trayecto! Sin duda, toda una experiencia de película.
- Twizel (Campos de Pelennor, El Hobbit: Un viaje inesperado y El señor de los anillos)
En este paisaje alpino se ha rodado más de una escena de la saga de El señor de los anillos. Empezando por la interminable persecución de los huargos y hasta llegar a la batalla más larga de la historia en los Campos de Pelennor, Twizel es un auténtico escenario de cine… ¡lleno de magia!
Sea donde sea, lo que tenemos claro es que, entre las mesetas volcánicas, las aguas turquesas y una naturaleza abrupta, se esconde uno de los escenarios cinematográficos más cotizados. Porque sí, Nueva Zelanda se ha convertido en un país de cine. Y para ti, ¿cuál es tu lugar de película favorito? Solo hay que dejar volar la imaginación y vivir un un viaje a Nueva Zelanda… ¡de película!