Con la llegada del otoño son muchas las parejas que comienzan a planear su boda, pensando en casarse el próximo año. La luna de miel es una de las partes más especiales y a la vez, uno de los principales quebraderos de cabeza para los novios. ¿Dónde ir, en qué fechas, cuánto tiempo…? La tienda de viajes más grande del mundo responde a todas estas preguntas y realiza viajes de novios a medida, ofrece una amplia variedad de destinos y dispone de honeymoon planners que acompañan a la pareja antes, durante y después de su viaje.
Según el tipo de viajero, PANGEA recomienda un destino u otro. Los hay para todos los gustos: para los aventureros, para los innovadores, para los que prefieren ir a su aire… Por eso, queremos contarte cuáles son los destinos más demandados en función del tipo de viajero:
Jordania, para los que aman la cultura por encima de todo
Jordania es uno de esos destinos top para parejas que aprovechan su luna de miel para descubrir nuevas culturas y desconectar de la rutina. Entre las actividades que eligen para realizar durante su estancia está pasear a caballo por Petra, ir en 4×4 por el desierto Wadi Rum, flotar en el Mar Muerto, ver el famoso Khanzeh o visitar el Monte Nebo, el lugar desde el que Moisés vio la Tierra Prometida, según la Biblia.
Chile, para los que buscan experiencias diferentes
Uno de los principales atractivos de este viaje es conocer la rica cultura de la capital chilena. Santiago atrapa con su mezcla de lo antiguo y lo moderno. Merece la pena también detenerse en la Región de los Lagos y visitar los Parques Nacionales de Vicente Pérez Rosales y Torres del Paine. Se puede admirar la diferencia entre sus paisajes, dominado por cascadas uno y por glaciares el otro. Los géiseres, los volcanes y las cuevas de hielo regalan espectáculos naturales tan sensacionales como sorprendentes. Para finalizar y vivir una experiencia única, es recomendable caminar por el paisaje del Valle de la Luna en el Desierto de Atacama, uno de los más inhóspitos del planeta.
La costa oeste de Estados Unidos y Los Cabos, para los que prefieren ir a su aire
Algunas parejas prefieren hacer el viaje por su cuenta. Alquilar un coche y recorrer la costa, desde Las Vegas hasta Los Ángeles, la ciudad de las Estrellas, pasando por los Parques Nacionales más espectaculares del país. Sobrevolar el Gran Cañón en helicóptero es increíble. También lo es visitar Mammoth Lakes, un lugar en el que reina la tranquilidad y donde el único ruido que se oye es el de la naturaleza. Y como no, San Francisco, una de las ciudades más pintorescas de Estados Unidos. Continuar después por Monterrey y Santa Bárbara para finalizar el viaje y relajarse en las cautivadoras playas de Los Cabos.
Tanzania, para los más aventureros
Botas de montaña, crema solar y cámara de fotos. No hace falta más para viajar a Tanzania. La propuesta es tentadora: hacer un safari a través de sus parajes y parques nacionales, contemplar las inmensas llanuras de Serengeti y la fauna salvaje que habita en ellas, recorrer el edén en que se ha convertido el cráter del Ngorongoro y ver unos atardeceres de película.
Sin duda, uno de los objetivos del viaje es poder ver a los cinco grandes: rinoceronte, león, elefante, leopardo y búfalo. En Tarangire se puede sentir la pureza de la esencia africana a través de sus mágicos baobabs. Muy cerca de allí, se encuentra el Lago Manyara que enamoró a Ernest Hemingway. Un viaje lleno de libertad, naturaleza y, por supuesto, aventura.
Indonesia, para los que quieren relax y playas de ensueño
Hay parejas que entienden su luna de miel como momento de descanso, pero no por ello se olvidan de añadir una pequeña dosis de aventura. Algunas de las actividades que no pueden faltar en este tipo de viaje: subir al monte Batur, hacer rafting en el río Ayung, montar en elefante en Ubud, visitar los templos de Jimbaran y, para terminar, pasar unos días en el paraíso. Las islas de Menyawakan, de arenas blancas y aguas cristalinas, darán a los novios la paz que tanto necesitan después de los estresantes preparativos de boda.
Japón, para los que se sienten atraídos por los contrastes
Una luna de miel en Japón es una sorpresa continua. Las parejas que se deciden por este rincón del mundo descubren que se trata de un destino de contrastes. Por una parte, la modernidad de la capital: dar un paseo por Akihabara, el barrio más friki, o visitar la Torre de Tokio, uno de los lugares más turísticos de la ciudad.
Por otro lado, las parejas descubren la cultura japonesa en su máximo esplendor al conocer Nara, el castillo de Osaka, el Templo Kinkakuji y el famoso santuario shintoísta de Heian mientras que se relajan en un mini-crucero por el Lago Ashi con el monte Fuji de fondo.
Australia, para los que aprovechan su luna de miel para viajar al otro lado del mundo
Los hay afortunados que consiguen juntar la luna de miel con sus vacaciones, de manera que acumulan hasta 23 días “de gloria”. Australia es un destino perfecto para aquellos que quieren aprovechar su luna de miel al máximo y sumergirse de pleno en la cultura australiana. Sidney, Kata Tjuta (las formaciones rocosas del centro rojo de Australia, en el desierto), el Parque Nacional Kakadu, el Bosque Tropical Daintree, la Gran Barrera de Coral… Una luna de miel de tres semanas con la que poder presumir no sólo de haber estado, sino de conocer Australia.
En definitiva, la amplia variedad de destinos hace que cada vez sea más difícil decidir dónde viajar. La gran ventaja en este sentido es la promoción que ofrece PANGEA: una segunda luna de miel gratis para celebrar el décimo aniversario de la pareja. ¡Así los viajeros no tendrán que elegir solamente un destino! Y vosotros, ¿en qué destinos estáis pensando para vuestro viaje de novios?
Muy interesante artículo.
¡Muchas gracias por tu comentario, Teusaquillo! Nos alegramos mucho de que te haya gustado el artículo 🙂 Un abrazo